El investigador asociado del MAS, Francisco Förster y director del bróker ALeRCE conversó con este medio internacional sobre el trabajo que se está realizando para analizar la gran cantidad de datos que liberará el Observatorio Vera Rubin cuando se ponga en funcionamiento. Trabajo que convirtió a ALeRCE en el único proyecto elegido por el observatorio, fuera de Estados Unidos y Europa, para realizar esta tarea.
“El Futuro de la astronomía está en el IA” titula revista Forbes en un artículo dedicado a la cobertura que el medio norteamericano realizó en diciembre de la conferencia Cosmic Streams, evento internacional organizado por MAS en el contexto de sus 10 años de funcionamiento, en colaboración con el Center for Mathematical Modeling (CMM).
“Unveiling the dynamic universe: cosmic streams in the era of Rubin”, juntó en Puerto Varas a científicos y científicas de todo el globo, que trabajan tanto de los telescopios que liberarán gran cantidad de datos astronómicos por noche – como es el caso del observatorio que se está construyendo en Cerro Pachón- con los telescopios que le harán seguimiento a los objetos de interés que se detecten.
Junto con ellos quienes, los que según el reportaje tienen el principal protagonismo: los expertos que elaboran los algoritmos y herramientas computacionales que permitirán separar y clasificar los objetos de interés entre los miles de terabytes de información que se generarán y que actuarán como mediadores entre los instrumentos que captan los objetos y los que harán seguimiento para estudiarlos. Así lo explica Förster en el reportaje. “Debido a la cantidad de alertas esperadas con el LSST, es necesario tener grupos especiales que tengan la capacidad de absorber el flujo de alertas y luego hacer algo con ellas”, asegura quien también es investigador del CMM de la Universidad de Chile.
Uno de esos intermediarios es el bróker ALeRCE. El proyecto, que nace al alero del MAS y del CMM y del que también son socios la Fundación Data Observatory y la Universidad de Concepción, fue parte del selecto grupo de siete seleccionados por el Vera Rubin para procesar los datos del “Legacy Survey of Space and Time” (Levantamiento del espacio y tiempo, o LSST por sus siglas en inglés). El bróker reúne a un grupo interdisciplinario de científicos y científicas, no sólo astrónomos, sino que una buena parte de ingenieros, expertos en ciencias de la computación y estadística. Todo ellos llevan años preparándose para este reto analizando los datos del telescopio the Zwicky Transient Facility (ZTF) observations (ZTF), entrenando la Inteligencia Artificial de la que habla reportaje que apareció en el portal de Forbes este enero. Este trabajo le ha permitido llegar al 2024 habiendo procesado del orden de 300 millones de alertas en tiempo real y descubierto al menos 20.000 candidatas a supernovas.
El futuro que menciona Forbes está a la vuelta de la esquina y aunque según asegura aún hay temas que resolver – como, por ejemplo, qué capacidad de autonomía se debe entregar al IA para realizar esta labor- Chile se ha puesto nuevamente a la vanguardia de lo que será esta “nueva astronomía”.
Imagen Principal: bservatorio Vera Rubin. Crédito: Rubin Obs/NSF/AURA