IV Congreso del Futuro abordará los desafíos que enfrenta el país en el siglo XXI

Columna escrita por Mario Hamuy Wackenhut, Director Instituto Milenio de Astrofísica, Académico Universidad de Chile 

Nuestra civilización se enfrenta a cambios tecnológicos a ritmos exponenciales que han significado una indudable mejora en la calidad de la vida de las personas. Este crecimiento, sin embargo, viene acompañado de costos medioambientales a escala global cuya evidencia más patente es el aumento de gases invernaderos que no logran ser absorbidos por el medio al mismo ritmo que sus emisiones. ¿Cómo lograremos alcanzar un desarrollo equitativo para todos los ciudadanos en armonía con el medio ambiente que nos sustenta? ¿Cómo compatibilizar el natural anhelo de nuestra civilización por alcanzar mayor prosperidad y desarrollo para sus habitantes cuando se vive en un mundo finito con recursos limitados? ¿Cómo lograr la prolongación de la humanidad en un planeta con riesgos naturales de extinción? Para poder abordar estas encrucijadas, debemos hacer esfuerzos urgentes por identificar nuevos paradigmas de gobernanza sustentados en un diálogo fluido y transversal entre ciencia, política y ciudadanía.

El IV Congreso del Futuro “Las encrucijadas del Siglo XXI”, que se inicia esta semana en el salón de Honor del Congreso Nacional en Santiago, abordará estos desafíos. Por cuarta vez, tendremos el privilegio de poder escuchar y conversar con gobernantes, pensadores, analistas y científicos que investigan en la frontera del conocimiento. Es un encuentro multidisciplinario sin precedentes que, tal como dice el nombre de este congreso, otorga la oportunidad para pensar en los desafíos de la humanidad para poder proyectarnos hacia el futuro.

Esta iniciativa permite que los científicos salgan de sus laboratorios y los legisladores de sus hemiciclos para tender puentes entre comunidades que han estado tradicional y culturalmente divorciadas en nuestro país. Se abre la esperanza de comenzar a derribar barreras y prejuicios para comenzar a pensar en una visión de futuro para nuestra sociedad. Una nación sin visión de futuro está condenada a sucumbir en una era del conocimiento cada vez más dominada por quienes tienen acceso al saber y a las tecnologías.

Chile es un país con vocación innata por la Astronomía debido a sus aventajados cielos, y es así que una vez más esta disciplina estará presente en el Congreso del Futuro. El año pasado tuve la oportunidad, junto a Dante Minniti, de presentar al recientemente creado “Instituto Milenio de Astrofísica – MAS”, proyecto financiado con un horizonte de 10 años por la Iniciativa Científica Milenio del Ministerio de Economía con el fin de preparar a nuestra comunidad para los desafíos que enfrenta la astrofísica en la nueva era de la “Big Data”. En esta ocasión el MAS estará presente con el investigador Alejandro Clocchiatti quien abordará los urgentes problemas de solucionar para poder soñar con estar en éste, nuestro planeta, por mucho más tiempo que el que ya hemos estado.

El Congreso del Futuro es una actividad anual organizada por la Comisión Legislativa de Desafíos del Futuro del Senado de Chile y por Consejo del Futuro. Ambas nacieron en 2011 y en su cuarta versión ya han posicionado al evento con fuerza como la instancia más importante de convergencia entre  ciencia y tecnología. La idea de hacerlo en enero ha sido muy acertada ya que coincide con la iniciativa Teatro a Mil que trae a nuestro país espectáculos culturales gratuitos de primer nivel. Así se va instalando en la ciudadanía la noción de que ciencia y tecnología también son parte de la cultura de un país.